Se espera que nuevas tendencias y herramientas transformen el campo, mejorando la capacidad de los peritos forenses para investigar y presentar pruebas en un entorno judicial. Estas innovaciones no solo ayudarán a detectar mejor los delitos, sino también a garantizar la integridad de la evidencia digital y aumentar la eficiencia en las investigaciones.
En este artículo, analizaremos las principales tendencias que marcarán el rumbo de la pericia informática forense en 2025 y qué aspectos son clave para mantenerse al día en un campo que está en constante cambio.
1. Inteligencia Artificial (IA) y Aprendizaje Automático (Machine Learning)
En 2025, el uso de Inteligencia Artificial (IA) y aprendizaje automático en el análisis forense será más común que nunca. Estas tecnologías permiten automatizar el análisis de grandes volúmenes de datos, identificando patrones y anomalías que podrían pasar desapercibidos para los humanos. La IA puede escanear rápidamente archivos, redes y dispositivos, acelerando considerablemente las investigaciones.
Además, la IA está demostrando ser útil para el reconocimiento de patrones en ataques cibernéticos, lo que permite predecir comportamientos futuros de ciberdelincuentes y mejorar la detección temprana de amenazas. Los algoritmos de machine learning también están siendo utilizados para la recuperación de datos eliminados, haciéndolo más preciso y eficaz.
2. Forense en la Nube (Cloud Forensics)
La computación en la nube se ha convertido en una parte integral de las operaciones empresariales y personales, lo que significa que una cantidad creciente de evidencia digital se encuentra almacenada en servicios en la nube. La forense en la nube está cobrando relevancia, y para 2025, será aún más crítica debido al aumento en el uso de soluciones como AWS, Google Cloud o Microsoft Azure.
Uno de los mayores desafíos en la forense en la nube es el acceso a los datos. Las investigaciones deben seguir procedimientos legales específicos y garantizar que se cumplan las normativas internacionales sobre privacidad de datos, como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD). En 2025, se prevé un mayor desarrollo de herramientas especializadas en el análisis de datos en la nube, facilitando el acceso a la información sin comprometer la seguridad ni la integridad de la evidencia.
3. Blockchain y Forense Digital
La tecnología blockchain ha crecido más allá de las criptomonedas, y para 2025, se espera que juegue un papel importante en la cadena de custodia de la evidencia digital. Blockchain permite el registro de transacciones o cambios en la evidencia de manera inmutable, asegurando que los datos no hayan sido manipulados o alterados durante su manejo.
Esto es particularmente relevante en casos judiciales donde la cadena de custodia debe mantenerse intacta para que la evidencia sea admisible. Blockchain proporcionará un método transparente y seguro para garantizar que cada cambio o acceso a la información quede registrado de forma verificable.
4. Pericia Forense de Dispositivos IoT
El uso de dispositivos conectados a Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) está en pleno auge, y con él, la necesidad de herramientas y técnicas especializadas en el análisis de estos dispositivos. Los dispositivos IoT serán una fuente creciente de evidencia en investigaciones judiciales, ya que muchos de ellos recopilan y transmiten información sobre actividades y comportamientos de los usuarios.
Desde cámaras de seguridad inteligentes hasta dispositivos domésticos conectados como termostatos y asistentes de voz, los peritos forenses deberán desarrollar nuevas metodologías para recuperar y analizar los datos de estos aparatos. Los desafíos incluyen el cifrado de datos y la fragmentación de la información en múltiples plataformas o redes.
5. Forense de Criptomonedas y Delitos Financieros
El auge de las criptomonedas ha traído consigo un aumento en los delitos financieros relacionados con el lavado de dinero, estafas y transacciones ilegales. La pericia forense de criptomonedas será una especialización crítica dentro del campo de la informática forense. Los peritos deberán estar capacitados en el rastreo de transacciones en cadenas de bloques (blockchains) y en la identificación de movimientos fraudulentos a través de criptomonedas como Bitcoin o Ethereum.
Herramientas avanzadas de análisis blockchain permitirán a los investigadores rastrear las transacciones desde el origen hasta su destino, ayudando a resolver casos complejos relacionados con el financiamiento del terrorismo, fraude y delitos fiscales.
6. Automatización del Análisis Forense
La automatización se está extendiendo rápidamente en muchos sectores, y el análisis forense no es la excepción. En 2025, veremos un aumento en las herramientas que permiten automatizar varias fases del proceso de investigación digital, desde la recolección de evidencia hasta su análisis.
La automatización permitirá a los peritos forenses gestionar mejor grandes cantidades de datos, realizando búsquedas rápidas y automatizadas en archivos masivos, dispositivos o redes. Esto reducirá significativamente los tiempos de análisis y mejorará la precisión al eliminar la intervención manual en tareas repetitivas.
7. Normativas de Protección de Datos y su Impacto en la Forense Digital
A medida que los gobiernos y las organizaciones se preocupan más por la privacidad de los datos, las regulaciones como el RGPD (Reglamento General de Protección de Datos) seguirán influyendo en la forma en que los peritos informáticos manejan la evidencia digital. Las normativas de protección de datos continuarán evolucionando, y los peritos deberán adaptarse para garantizar que la recolección y análisis de la información cumpla con las leyes locales e internacionales.
El respeto a las normativas de privacidad no solo protege a los individuos, sino que también es esencial para que la evidencia sea admisible en un tribunal. En muchos casos, la violación de estas leyes puede resultar en la inadmisibilidad de pruebas, lo que podría comprometer la resolución de un caso.
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